LOS SUBORDINADOS TIENDEN A DECIR QUE SI AL JEFE, Y ESO ES UN PROBLEMA
Como no quieren tensiones van a decir que si tanto si piensan cumplir la orden como si no.
De usted solo las órdenes imprescindibles, pero asegúrese de que esas pocas se toman en serio.
De las órdenes espaciadas, separadas unas de otras, para que no se estorben entre sí.
Si se hace evidente que se ha equivocado en una orden, rectifique lo antes posible: no deje que los subordinados se desmoralicen y, de paso, se recreen en su error.
Convenza a sus subordinados de que cumplir una orden no es otra cosa que resolver un problema.